lunes, 14 de abril de 2008

EN JULIO, MARGARITO-COTTO



Mientras que Floyd Mayweather Jr. toca el violín, la cargada división welter sigue su camino sin él. Ahora, el escenario está armado para el enfrentamiento más impactante de boxeadores de 147 libras: Miguel Cotto vs. Antonio Margarito.
Marquen el 26 de julio en sus calendarios, el sitio aún debe ser determinado.
Mientras que la piedra angular de la división Mayweather contempla las artes marciales y aguarda una revancha contra Oscar De La Hoya (la que le dará millones de dólares pero no le aportará en nada), Cotto detuvo a Alfonso Gomez en cinco rounds y Margarito noqueó a Kermit Cintron en el sexto el sábado por la noche.
Los resultados ante una misteriosa tribuna de 9,427 personas en el Boardwalk Hall fueron los que pautaron su enfrentamiento para el verano.
Mayweather nunca mostró ganas de pelear contra alguno de ellos, pero Cotto y Margarito tienen historia de haber peleado contra oponentes de calibre. Ahora, se enfrentarán ellos dos.
"Creo que ambos dieron muy buenas performances y no podíamos pedir más", dijo Emmanuel Stweard, quien estuvo de lado de la derrota como entrenador de Cintron. "Fueron dos performances muy buenas. Son ambos muy buenos boxeadores".
Cotto (32-0, 26 KOs) venció a Gómez (18-4-2, 8 KOs) en cinco rounds no competitivos para retener su título, la pelea terminó con un Gómez deteriorado en el banco hacia fines del round.
"Cotto envió un mensaje", dijo el entrenador asistente Miguel Díaz. "Castigará a quien se meta en el ring con el".
Uno puede asumir que eso va para Margarito y Mayweather también.
En la co-presentación, Margarito noqueó a Cintron con un golpe al cuerpo en el sexto round para ganar parte del título tres años después de haber noqueado a Cintron por primera vez.
"Voy a estar listo para quien sea, especialmente para Margarito", dijo Cotto.
Dijo Margarito: "Me prometieron que iba a pelear contra Cotto y más les vale que se cumpla".
Ninguno se mostró demasiado preocupado por Mayweather, especialmente Cotto, quien respondió lo siguiente cuando se le preguntó por el boxeador: "Soy un boxeador, no un promotor".
Evan Steward, quien también trabajó la segunda pelea en su rol normal como analista de HBO, no estaba pensando en Mayweather.
Cotto nunca se sintió desafiado por Gomez, la popular estrella de la primera temporada de The Contender, quien obtuvo la pelea tras haber noqueado a Arturo Gatti el verano pasado.
Cotto no podía fallar. Aterrizó 188 de 369 golpes (51 por ciento) mientras que Gómez aterrizó 63 de sus 312 (20 por ciento).
A segundos de comenzada la pelea, el rostro de Gómez ya mostraba desgaste debajo de su ojo izquierdo mientras Cotto aterrizaba golpes en el medio.
Cotto, saliendo de una victoria más competitiva contra Shane Mosley en noviembre, apaleó a Gómez con un golpe derecho al cuerpo en el segundo round. Un golpe izquierdo contra el cuerpo puso a Gómez en el piso una vez más en el tercer round a medida que el round terminaba.
En el quinto round, Cotto lo volvió a derribar, esta vez con un jab, síntoma de que la pelea estaba por terminar. A medida que el round progresaba, Cotto, de 27 años de edad, ya no parecía querer seguir castigando a su oponente.
"Quise trabajar y hacer las cosas bien", dijo Cotto, quien tuvo su cuarta defensa.
Finalmente, tras el final del round, el árbitro Randy Neumann detuvo la pelea por consejo del doctor Mark Schaber.
"Yo quería continuar", dijo Gomez, de 27 años de edad. "El doctor dijo que no podía ver con mi ojo derecho".
"Antes de la pelea uno siempre se preocupa, pero sabíamos que teníamos al mejor boxeador", dijo Evangelista Cotto, en tío y entrenador de Miguel.
Margarito clamó su segundo título welter con la destrucción de Cintron.
En el primer encuentro en el 2005, Margarito, quien para ese entonces estaba defendiendo un título, detuvo a Cintron en el quinto round.
En la pelea del sábado, Cintron entró como dueño del título hasta que Margarito lo noqueó con un golpe izquierdo al cuerpo a 1:57 de comenzado el sexto round.
Cintron (29-2, 27 KOs), realizando su tercera defensa, podrá haber durado más en la revancha, pero fue castigado seriamente.
"Tenía a Cintron desde un comienzo", dijo Margarito. "Me sorprende que haya durado tanto".
Como en el 2005, Cintron nunca estuvo en la pelea. Esa fue su primera pelea importante y no supo pelear bajo presión.
Después de eso reconstruyó su carrera y ganó un título tras haberse unido a su entrenador Steward, quien hizo lo posible por ayudarlo a recuperar su confianza.
Pero Margarito (36-5, 26 KOs) aparentemente tiene su número.
En los primeros rounds Margarito supo tomar control de la situación. Comenzó mucho más rápido de lo que suele hacer, quizás después de haber aprendido su lección contra Paul Williams el verano pasado.
Margarito aterrizó 257 de 611 golpes (42 por ciento) mientras que Cintron conectó en tan sólo 136 de 451 (30 por ciento), según las estadísticas de CompuBox.
"Desgastó a Kermit", dijo Steward.
Cintron, de 28 años de edad, abrió una pequeña cortadura al costado del ojo izquierdo de Margarito, pero Margarito tuvo un tercer round impactante. Casi noquea a Cintron tras que Cintron se diera vuelta hacia el árbitro para quejarse por algo y Margarito no paraba de dar golpes.
En el quinto round, Margarito, de 30 años de edad, continuó aterrizando golpe tras golpe. Cintron parecía estar listo para ser noqueado cuando el árbitro Earl Brown le advirtió a Margarito por un golpe detrás de la cabeza.
En el próximo round se terminó la pelea.
Y ahora estamos a la espera del enfrentamiento entre Cotto y Margarito.

MÁS FOTOS DEL NOCAUT HISTÓRICO. DECLARACIONES DE SÁNCHEZ ATOCHA






"Es la primera vez que cae y, moralmente, está mal", confesó su mánager y preparador Ricardo Sánchez Atocha. "Nos vamos a dar una semana de reflexión para ver qué hacemos, porque aunque es el aspirante oficial al Mundial, ahora la WBA podría cambiarlo al no haber logrado el Europeo", anadió. No se habla de retirada (el boxeador tiene 40 años), pero no disputar el Mundial podría ser un palo muy fuerte. "Hay que meditar", cerró Atocha. ­

UN NOCAUT PARA LA HISTORIA







El combate entre el alemán Sebastián Sylvester y el madrileño Javier Castillejo comenzó con la ventaja para el local de los 4.600 fanáticos que lo apoyaban en las gradas del Pabellón de Brandenburgo, y para el español, las ventajas radicaban en la experiencia y en el palmarés. 72,2 Kg. para el Lince y doscientos gramos más para el germano.

El primer asalto fue de tanteo, con escasos golpes, aunque Javi sacaba constantemente su jab. Lo único destacable, un gancho con la derecha de Sylvester. El segundo round, comenzó con el primer interesante 1-2 del alemán, respondido rápidamente por Javi, quien se lanzó por su rival, recibiendo otra derecha. Castillejo, no obstante, era el más agresivo de la pelea. La mala noticia para el local, era el corte en su ceja, en un cabezazo fortuito.

En el tercero, Sylvester se mueve bien en la distancia con su jab de largo alcance, pero el Lince se envalentona, y le mete 5 golpes consecutivos al alemán, antes de un duro intercambio de golpes final. La ceja de Sylvester luce cada vez peor, y en su esquina se afanan con la vaselina. Es un asalto soso, pero la ventaja en puntos es clara hasta este momento para el aspirante, en este caso, el púgil español. La ceja del alemán se torna en preocupación evidente e, incluso, en circunstancias parecidas, hemos visto más de una vez, en parar una pelea, pero el médico decide que ésta continúe.

El quinto asalto comienza con tres rectos del alemán a la cara de Castillejo. La iniciativa sigue del lado del español, pero empieza a verse un Castillejo cansado.

No obstante, a esas alturas del combate, la televisión alemana ofrece el dato de que Castillejo supera, 51% por 44%, en efectividad al germano. El sexto asalto es la clave del combate, y, posiblemente, el peor en la exitosa carrera del Lince. Toma todas las manos que le propina el alemán, ante el estupor de todos. Baja la guardia, y se queda a merced de Sylvester. Sólo la experiencia y la bravura inigualable de Javi, le permiten aguantar en pie, ante un público enardecido. A esas alturas, la única esperanza está en la ceja de Sylvester, y en que se parara la pelea. En el séptimo round, Javi se resbala al principio, y no reacciona, como en la pelea ante Carrera. El germano sigue llegando a placer ante una mala estrategia defensiva de Javier Castillejo. En el octavo round, aunque continúa llegando con más claridad el campeón, Castillejo iguala la pelea, y parece reaccionar.

Las esperanzas de las decenas de españoles renacen. Pero, en realidad, es el canto del cisne. El noveno round, nos ofrece más de lo mismo, los golpes rectos de Sylvester castigando duramente al español. Alguna combinación en respuesta del nuestro, hasta que el referee Erkki Meronen pide tiempo, para advertir al español por algún golpe ilegal. En el descanso posterior, el médico de la EBU está pendiente de la ceja, cada vez en peor estado, del germano, aunque no interviene. Curiosamente, el español presenta un aspecto mucho mejor, aunque esté perdiendo ya a esas alturas la pelea. ¿Reaccionaría el Lince?

La respuesta es no, la tele, siempre tan chivata, nos ofrece una mirada perdida de Castillejo, que lo dice todo. Lo pasa mal, pero es infatigable y sigue buscando la pelea. Se observan pocas fuerzas también en el alemán, sorprendido de ver de pie aún a su rival. El penúltimo asalto comienza con potentes jabs del alemán, y un 1-2 que hace daño a nuestro compatriota. El Lince quiere jugársela, pero las fuerzas escasean. El último descanso y todo el último asalto, lo viven los cerca de 5.000 seguidores alemanes en pie, entusiasmados por el probable triunfo de su compatriota, ante un rival al que en Alemania conocen tan bien.

Parece que todo quedará en una victoria local a los puntos, cuando a los 1:53 minutos del último asalto, llega un momento que aún no podemos quitarnos de la mente. Una serie terrorífica de Sylvester acaba con un gancho al mentón del parleño, que cae a la lona como un guiñapo, ante el estupor y la incredulidad de los españoles que siguen el combate.

El nocaut es tan fulminante, que la televisión alemana, con buen criterio, no ofrece más imágenes de nuestro héroe nacional, hasta que pasados más de cinco minutos, puede, a duras penas, levantarse de la lona. Un K.O. terrible. Una victoria de Sylvester inapelable. Y una sensación, puede que errónea: Castillejo, y nos ponemos de pie para decirlo, con todos los respetos, ha escrito la última página de su extraordinaria carrera pugilística. A partir de ahora, que el Lince, nuestro héroe, el mejor boxeador español de todos los tiempos, decida lo mejor para él.

Barthelemy pudiera ser el primer titular entre los tres campeones de Atenas


Con la victoria de Yan Barthelemy por decisión unánime frente al colombiano José García Bernal, en la cartelera boxística del sábado en Tampa, el cubano dio otro paso rumbo a su aspiración de ganar la corona mundial en el profesionalismo.
Barthelemy dominó todos los asaltos con rápidas y precisas combinaciones, regalando a los aficionados una exhibición de buen boxeo, para mantener su invicto en seis combates.
Los tres jueces le dieron el triunfo al antillano con igual puntuación 60-53.
En el quinto asalto, García Bernal recibió un conteo de protección.
''Yan dio un recital de boxeo, y aunque no ha noqueado, tampoco ha recibido golpes. Su defensa es muy buena y se encuentra preparado para combates con rivales superiores'', dijo su entrenador Roberto Quesada.
Barthelemy, campeón olímpico, mundial y panamericano en el boxeo amateur donde cosechó 400 triunfos en 410 peleas, aspira a la faja de las 118 libras.
Dos de los campeones en la esta división son los mexicanos Christian Mijares que ostenta el fajín del Consejo Mundial de Boxeo, y Fernando Montiel que es dueño del cinturón de la Organización Mundial.
''Me siento en perfectas condiciones'', indicó Barthelemy. ``Mi sueño es ganar la corona mundial, y estoy preparado física y mentalmente para lograrlo''.
El próximo combate del oriundo de Arroyo Naranjo será en el mes de junio. Si sale airoso podría pelear nuevamente a finales de año, con la mirada puesta en ubicarse entre los 10 mejores de su división, lo que podría llevarlo con un poco de suerte a una pelea por el título.
En el pleito estelar de la noche, el estadounidense Antonio Tarver superó por decisión unánime en 12 asaltos al británico Clinton Woods para conquistar el cinturón mundial de las 175 libras de la Federacion Internacional de Boxeo.
Tarver, 27-4 (20 KOs), controló las acciones desde la campana inicial para llevarse el veredicto de los jueces 116-112, 117-111 y 119-109.
En otra pelea por la corona, Glen Johnson retuvo su faja de los semicompletos de la WBC, al vencer por decisión unánime al retador Chad Dawson. Los tres jueces favorecieron 116-112 a Johnson.