miércoles, 11 de febrero de 2009

LOS CAMPEONES MUNDIALES INVICTOS DE LA HISTORIA


LOS CAMPEONES MUNDIALES INVICTOS DE LA HISTORIA
Cuando Rocky Marciano anunció su retirada el 27 de Abril de 1.956, con un récord de 49 victorias (43 de ellas antes del límite), se convirtió en una leyenda del deporte, pero cuando falleció el 31 de Agosto de 1969, cuando el avión en el que viajaba se estrelló cerca de Des Moines, era ya un mito. Ahí es nada, 49 victorias de 49 combates en el peso completo. La carrera de este hombre, nacido en Brockton, Massachusetts y de 1,78 metros, que en el boxeo de hoy día, sería un peso crucero, se fraguó cuando, derrotando a Harry Matthews en dos asaltos el 28 de julio de 1.952, se coronó como campeón del mundo, haciendo posteriormente siete defensas de su entorchado, aunque la pelea que marcó su carrera fue la que le enfrentó al grandioso Joe Louis, cuando este, acuciado por problemas económicos, decidió descolgar los guantes. Aquel 26 de octubre de 1.951, en el Madison Square Garden, sin título en juego, puso fin a la trayectoria del para muchos mejor peso pesado de la historia, y catapultó la de este hombre, cuyo nombre, Rocco Francis Marchegiano, delata su procedencia italiana. A partir del malhadado día de agosto de 1.969, todos los boxeadores quisieron ser invictos como Rocky, y quien más quien menos, trató de emularlo.
Ochenta años antes, el 29 de octubre de 1.886, un irlandés de Cork Ireland, Jack McAuliffe, conseguía por vez primera el título mundial del peso ligero, ganando a Billy Frazier, un boxeador mediocre, de Somerville, Massachusetts, por nocaut en ¡21 asaltos!, y que no ganó uno solo de los siete combates que realizó.
McAuliffe se retiró el 30 de septiembre de 1.879, con un palmarés impoluto de 35 triunfos y 6 combates nulos. Fue el primer gran invicto de la historia del boxeo.
Volviendo al siglo XX, in inglés de Stepney, Terry Marsh, gobernó en el peso superligero en dos ocasiones: venció por K.O.T. en 10 asaltos a Joe Manley y en su despedida, con solo 29 años, retuvo la corona de la F.I.B. ante el japonés Akio Kameda. Curiosamente, amén de invicto en únicamente 27 peleas (un nulo) se parecía a Marciano en la estatura: 1,78 metros, bastante alto para su peso.
El ídolo de Cuernavaca, Ricardo López, apodado por motivos obvios, “Finito”, fue un sensacional boxeador de los pesos paja y minimosca, que debutó en enero de 1.985, con apenas 18 años, que ya se proclamó campeón universal en octubre de 1.990, cuando destruyó en cinco asaltos, al nipón Hideyuki Ohashi, en su propia tierra del sol naciente. Acumuló un total de 22 defensas en el peso inferior de la escala pugilística, dándole tiempo aún de derrotar a Will Grigsby, Ratanapol Sor Voropin y Zolani Petelo, para retirarse invicto en 2.001, con un récord de 51 victorias y un match nulo, ante el “Búfalo” de Nicaragüa, Rosendo Álvarez, al que ganó en apretada decisión dividida, ocho meses después.
Michael Loewe es un peso welter rumano, nacido en Hunedoara, que hizo toda su carrera en Hamburgo, la ciudad alemana en que residía, y en el resto del país germano.
Este hombre, al igual que Marciano, aunque las comparaciones sean odiosas, tampoco conoció ni tan siquiera un nulo. Llevó a cabo una corta carrera de seis años, con 28 peleas, y se retiró como campeón el 29 de septiembre de 1.997, reteniendo por primera y única vez la corona de la O.M.B. ante el irlandés Michael Carruth, en decisión mayoritaria.
En la para nosotros lejana Asia, nació el coreano Ji-Won Kin, el 6 de agosto de 1.959. Comenzó su carrera, siempre en el peso supergallo, en Seul, donde conoció cinco victorias y dos empates, en los inicios de su carrera. El 3 de enero de 1,985, ante su compatriota Sung-In Suh, se hizo con el cetro de la F.I.B. por K.O. en 10 asaltos, y retuvo su corona en cuatro ocasiones, para retirarse en loor de multitudes, siempre boxeando en su país, ante el filipino Rudy Casicas, con 18 peleas, con los dos nulos reseñados anteriormente y el resto, con el brazo en alto tras sus combates.
Otro peleador que solo consiguió triunfos encima de un cuadrilátero fue el namibio Harry Simon, que dio la sorpresa, arrebatando la corona del peso superwelter ante un grande de la última década, como es el estadounidense, Ronald “Winky” Wright, al que ganó en una ajustada decisión mayoritaria, en pelea celebrada en Temba, Sudáfrica. Defendió con éxito su correa en cuatro ocasiones, atrapando la correa del peso superior, el peso medio, ante el sueco Armand Krajnc, el 6 de abril de 2.002, venciéndole por decisión unánime, retirándose a continuación, aunque volviera esporádicamente hace dos años, en una sola pelea, sin título, también resuelta con victoria. En total, 24 de 24 para el namibio.
Algo más reciente en el tiempo, y muchísimo más conocido para los aficionados al pugilismo, resultó la carrera del alemán de Berlin, Sven Otkke, quien obtuvo en su prolífica carrera de solo siete años, 34 victorias en otras tantas peleas, de las cuales, 22 nada menos, fueron con el entorchado del peso supermedio de la F.I.B. en juego. Inolvidables sus duelos ante gladiadores del ring, como Glenn Johnson, Anthony Mundine o Armand Krajnc, el día de su retirada, en Magdeburgo, Alemania, el 27 de marzo de 2.004. Un grande de esta época, sin duda.
Por tanto, por orden cronológico, Jack McAuliffe, Rocky Marciano, Terry Marsh, Ji-Won Kim, Harry Simon, Ricardo “Finito” López, Michael Loewe y Sven Ottke son, salvo error u omisión, para lo que pediríamos la ayuda de los lectores, los únicos campeones mundiales que se retiraron con la vitola de invictos, si bien solo Marciano, Simon, Loewe y Ottke no conocieron ni el empate en las cartulinas de los jueces. Ahora, hay dos fenómenos del boxeo actual, con 32 y 36 años de edad, nos referimos a Floyd Mayweather Jr. y Joe Calzaghe, que están formalmente retirados y también solo conocieron las mieles del triunfo, pelea tras pelea, y título tras título, pero, ¿quién nos puede asegurar que una oferta mareante no lo sacarán del retiro y hasta de su condición de invictos? Quien esto escribe estas líneas, desde luego, no.

JOSÉ MANUEL MORENO. BOXEO VELEÑO.

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