viernes, 29 de enero de 2010

En la meca del boxeo


EMILIO MARQUIEGUI

Optimismo y serenidad son las sensaciones que se perciben en el ánimo de Gabriel Campillo y todo su equipo horas antes de que suene la campana en el Hard Rock Hotel & Casino de Las Vegas, el hotel del famoso tartar de atún del Nobu, la playa artificial y por el que han desfilado en los últimos 15 años on tour los Rolling Stones, Alicia Keys o The Killers.
Por segunda vez en su carrera, el madrileño defiende la próxima madrugada -pocos minutos antes de las ocho horas del sábado en España-, ante el kazajo Beibut Shumenov, su título mundial semipesado WBA, que lograra en Argentina en junio pasado. Será una reedición de la pelea que ambos púgiles sostuvieron en Kazajstán en agosto, con victoria del español. “Y será una pelea similar, aunque ahora estoy más fuerte todavía”, anuncia el español, que pretende ser el primer púgil de este país que triunfa sobre un ring en Estados Unidos.
El kazajo pelea en 'casa', ya que reside en Las Vegas, por lo que las casas de apuestas han igualado lo ofertado por ambos
Shumenov volverá a sentirse en un ambiente familiar. La pasión de Astana se adorna ahora con el glamour y la megalomanía de Las Vegas, la ciudad donde reside, lo que empuja a las casas de apuestas a igualar el valor ofertado por ambos.
También seguramente se habrán fiado del precedente, un resultado ajustado con una decisión nula de un juez y las otras dos dando la victoria al español por escaso margen. “Aquella pelea”, recuerda Campillo delante de una pechuga de pollo antes de ir al pesaje, “fue muy bonita. Él salió muy fuerte lanzando golpes muy duros y rápidos, pero con el paso de los asaltos igualé la contienda y Shumenov acabó sufriendo. Lo pasó realmente mal al final”.
Lo acontecido, sin embargo, sólo vale para engrosar enciclopedias. Shumenov, que pasó por los Juegos Olímpicos de Atenas de puntillas, es un púgil suelto de brazos, que siempre va hacia delante y presiona. Dotado de una contundente pegada —“tira cada golpe con todo lo que tiene y con mucha violencia”, desvela Campillo— no hay resquicio para que se pueda confiar, especialmente en los primeros asaltos, los que más le suelen costar al campeón. No obstante, su figura no amedrenta al madrileño, que hasta se atreve con un pronóstico: “Yo diría que ganaré antes del límite, en el décimo o undécimo asalto, porque cada vez pego con más contundencia”.
Campillo repite combate con el kazajo y considera que será "una pelea similar, aunque ahora estoy más fuerte todavía”
En esa espiral positiva está también su rincón. La confianza es plena en Ricardo Sánchez Atocha, sus ayudantes Matías, Chumi y Sarmiento, los sparrings Usman y Caefa e incluso en la esposa de Campillo, aunque hay un ligero temor a una encerrona, dado que el equipo del aspirante participa en la promoción de la velada junto a Óscar de la Hoya y su empresa Golden Boy Promotions, y, desde luego, no se esperan facilidades de ningún tipo.
Así son las horas previas en el Hard Rock Hotel & Casino, donde en las pantallas de vídeo se anuncia la pelea, el público reconoce al campeón, le da ánimos y le sube la moral. Aunque de momento la mayoría está aún preocupada de saltar la banca.

1 comentario:

Cristian dijo...

Sin dudas Las vegas es de las ciudades con mas historia en el mundo del boxeo. Obviamente el Madison ha albergado grandes peleas también, pero no hay como la ciudad de Nevada. No veo la hora de poder obtener mis reservas en los hoteles baratos en las vegas para poder ver la pele de “Maravilla” Martinez