jueves, 11 de noviembre de 2010

PACQUIAO Y SU PODER DE CONVOCATORIA


ESPN

Costó mucho encontrarlo, y llegó desde el lugar menos pensado. Pero el filipino Manny Pacquiao ha logrado ocupar el trono que hasta hace unos años le perteneciera a figuras como Oscar de la Hoya, Mike Tyson o Sugar Ray Leonard.
Podremos discutir si Pacquiao es hoy el mejor de todos, ya que su largamente esperado enfrentamiento ante Floyd Mayweather -- su único rival directo en esa competencia -- no sólo no se ha producido, sino que no existen indicadores sólidos de que vaya a generarse. Pero lo que está fuera de dudas es el poder de convocatoria del Pacman.
Pacquiao es desde hace un tiempo el boxeador más popular del planeta. Y el próximo 13de noviembre tendrá una nueva prueba, cuando enfrente al mexicano Antonio Margarito, en el estadio de los Dallas Cowboys, donde se esperan cerca de 60 mil espectadores.
Se sabe. Pacquiao es un caso único. Desde su debut en 1995, como peso minimosca, ha subido nada menos que diez categorías, conquistando numerosos títulos mundiales y derrotando a figuras como De la Hoya, Miguel Cotto, Erik Morales, Marco Antonio Barreta y Juan Manuel Márquez, entre otros.
Indudablemente le gustan los desafíos. Y el próximo sábado tendrá otro de los grandes. Porque Margarito es un boxeador fuerte, de mucha mayor envergadura y con sed de revancha.
Pese a haber quedado manchado por el escándalo de sus vendajes irregulares previo a la pelea que luego perdiera ante Shane Mosley, en enero del año pasado, uno no puede olvidarse de que el mexicano reinó varios años como campeón de los welter.
Y este combate será dentro de la división de los superwelter (estará en juego el cetro del CMB), lo cual, en teoría, le da una ventaja aún mayor, aún cuando fue pactado en un peso límite de 150 libras.
Como ha venido ocurriendo en los últimos años, Pacquiao se medirá ante un rival que pelea en su peso natural, a diferencia de su propio caso. Y allí radica el interés. Un poco por la siempre interesante historia de David vs. Goliat, que tanta admiración despierta en mente de los seres humanos.
"Ya estoy acostumbrado a pelear contra rivales más grandes que yo. Y hasta ahora no ha sido un problema. Mi velocidad es la clave. He trabajado con sparrings que me llevan gran ventaja física, pero eso no es un problema para mí", dice Pacquiao al respecto.

"No llego a esta pelea pensando que tengo ventajas o porque Pacquiao es más pequeño que yo es un combate fácil. Nada de eso. Pacquiao es muy veloz y esa es su grgan virtud. Pero trabajé para ello con sparring muy rápidos, que me exigieron mucho", cuenta Margarito.
Lo cierto es que, pese a las apreciables diferencias físicas, una vez más los promotores de Pacquiao, la Top Rank, eligieron a Margarito porque seguramente piensan que el filipino puede imponer su velocidad por sobre la fortaleza, lo cual ha hecho al menos en sus últimas cinco presentaciones, ante Joshua Clottey, Cotto, Ricky Hatton, De la Hoya y David Díaz.
En todas esas peleas Pacquiao fue, simplemente, demasiado rápido para sus rivales. Y a excepción de Clottey, que adoptó una actitud ultradefensiva durante los 12 rounds, el filipino terminó imponiendo la ley que afirma que "el golpe que más daño causa es aquel que te toma por sorpresa".
La gran clave para que el efecto sea tan devastador ha sido siempre la extraordinaria condición física del Pacman. Aún cuestionado por muchos -- entre ellos Mayweather y su equipo, que dieron a entender que usaba sustancias prohibidas, lo cual nunca fue probado -- el filipino ha formado una sociedad ideal con su preparador físico, el colombiano Alex Ariza.
Sin embargo, en las últimas semanas el entrenador Freddie Roach sorprendió afirmando que "éste ha sido el peor campo de entrenamiento de Pacquiao, ya que su mente estaba en otro lado, sobre todo en la política".
También se lo escuchó decir que "si Pacquiao no mejoraba, perdería con Margarito".
Luego, minimizó sus dichos, afirmando que el problema había sido durante el entrenamiento en las Filipinas, pero una vez que fueron a Los Ángeles la cosa se revirtió.
En realidad, esta no es la primera vez que se dice que la carrera política de Pacquiao podía era una peligrosa distracción. En la teoría, esto puede ser cierto. Pero los hechos demuestran lo contrario.
Y, en realidad, da la sensación de que, en definitiva, las afirmaciones de Roach son simplemente un curioso método de promocionar el combate.
"No fue nuestro mejor entrenamiento, pero bastante bueno. Manny llegará muy bien preparado y eso es lo que cuenta. No será una pelea complicada para él". Señaló Roach en los últimos días.
"Entiendo que Freddie estuviera preocupado al principio, pero le he demostrado en los guanteos que estoy muy bien. La política no es una distracción para mí, en tanto entrene duro. Nadie tiene por qué preocuparse. Hay tiempo para hacer las dos actividades", dice Pacquiao.
En cuanto a la estrategia, aquí no hay mucho para analizar, al menos del lado de Pacquiao.
"Creo que Manny va a abrumar a Margarito con su velocidad y sus combinaciones. Quizás en ocho o nueve asaltos logre quebrarlo", afirma Roach.
"Nosotros tenemos nuestra estrategia. Sabemos que Pacquiao comete algunos errores e intentaremos sacarle ventajas a ello. Hemos visto sus peleas una y otra vez", señala Robert García, entrenador de Margarito, sin revelar demasiado.
"Puedo detectar algunas cosas de Pacquiao. Pero lo verán sobre el ring. Puede que él crea que es un gran pegador en este peso, pero eso lo veremos", dice Margarito.

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