viernes, 2 de abril de 2010

Hopkins y Jones Jr. por la revancha


DAN RAFAEL

Aún hace dos años, tras que Roy Jones venciera a lo que quedaba de Felix Trinidad en una pelea espirituosa que generó más de 500,000 ventas de PPV, una revancha entre Jones y Bernard Hopkins aún hubiera sido grande.
¿Ahora? No tanto -- no tantos años de pasado el declive de Jones, que culminó con una derrota por nocaut de primer round contra Danny Green el 2 de diciembre, la que Jones llamó una detención prematura.
Los fans de las peleas habían anticipado una revancha entre los futuros integrantes del Salón de la Fama a medida que crecían en la elite del boxeo en los años desde su primera pelea en 1993, cuando Jones venció a Hopkins para tomar el título vacante de medianos en una pelea olvidable.
Volviendo a mayo del 2000, cuando Hopkins comenzó a pelear en HBO y apareció en la tarjeta no principal de Jones, hubo numerosos intentos de realizar una revancha. No se dió. Discutieron sobre divisiones de porcentajes, cláusulas de revancha y detalles.
Una y otra vez, sus equipos intentaron. Una y otra vez, HBO estuvo contra la pared. Una y otra vez los boxeadores no lograron concretar la pelea.
Cuando finalmente llegaron a un acuerdo en septiembre, ya la noticia no causó gran impacto sobre el público. Para muchos la pelea había suspendida tanto mucho tiempo y ya no tenía el mismo atractivo, especialmente a causa del declive de la carrera de Jones.
La última fue cuando Jones fue noqueado por Green en una supuesta pelea de pre-calentamiento el mismo día que Hopkins tomó una decisión poco ilustre contra Enrique Ornelas en su revancha. Parte de su contrato era que cada uno tenía que ganar su pelea previa, con lo que la pelea parecía estar muerta cuando Jones perdió, especialmente de tal manera. De todas maneras Jones y Hopkins, aún sin un lugar a donde ir, afinaron su trato y la pelea fue revivida.
Ahora, aunque la revancha claramente está sobrecocida, se enfrentarán en Mandalay Bay el sábado por la noche (PPV, 9 ET, $49.95) -- 17 años después de haberse enfrentado como contendientes en ascenso en el RFK Stadium en Washington D.C., en la tarjeta no principal de la pelea titular de Riddick Bowe contra Jesse Ferguson.
A medida que la pelea se va acercando la pelea, la anticipación no es exactamente palpable, aunque queda claro que Hopkins (50-5-1, 32 KOs) y Jones (54-6, 40 KOs) se estén tomando el enfrentamiento seriamente.
"Al final del día, llegado el sábado, voy a demostrarle al mundo porque Roy Jones Jr. evitó al Executioner por 17 años", dijo Hopkins. "Le voy a patear el trasero".
Dijo Jones, "mi trabajo es noquearlo y eso es lo que voy a hacer".
Por más serios que suenen los competidores, la pelea no ha despertado mucho interés en la gente. Las ventas de entradas son malas y la conferencia de prensa del miércoles no tuvo mucha repercusión. Una pelea que en su momento hubiera llamado la atención de todos los medios del mundo contaba con tan pocos periodistas que los boxeadores tranquilamente podrían haber realizado entrevistas uno-a-uno.
Cuando se le preguntó porque la gente tendría que comprar la entrada a la pelea, Jones fue directo. "Porque ponemos nuestras cabezas en juego y porque ambos tenemos carreras estelares", dijo Jones. "Entonces porqué no habría la gente de pagar dinero por ver a dos muchachos que cuentan con dos carreras excelentes y que los entretuvieron por 17 años. Saben quienes somos. Nosh an observado por años. Los entretuvimos por años, ¿Porqué no devolver un poco de todo lo que les dimos tantos años?".
Los promotores, Golden Boy (Hopkins) y Square Ring (Jones) están haciendo lo major que pueden por dar luz al evento, enfatizando en que el evento principal no comenzará hasta la compleción del segundo partido de la NCAA del Final Four entre Duke y West Virginia. Richard Schaefer de Golden Boy también destacó el hecho de que a pesar del limitado vínculo de HBO con la pelea, no habrá una repetición la semana próxima.
La situación ha llegado a esto para dos de los nombres más reconocidos del boxeo, en parte porque hay muchas preocupaciones sobre que Jones continúe la pelea.
Aunque Hopkins es mayor con 45 años de edad, permanence en la cima de la lista de todos los tiempos de la libra por libra. Jones, 41, ha tenido un declive precario, estando a 5-5 en sus últimas cinco peleas sufriendo tres nocauts tenebrosos y dos derrotas por decisión de poco lustre.
De hecho, el presidente de Golden Boy Promotions, Oscar De la Hoya, que una vez fue noqueado por Hopkins dijo tras la derrota con Green, Jones debiera haber renunciado.
"Este es uno de esos casos que uno ve todo el tiempo, un gran boxeador que no sabe cuando retirarse", dijo De La Hoya. "...Creo que debiera considerer el retiramiento muy cuidadosamente. Ya lo hizo todo. Ya demostró quien era. No hay necesidad de seguir peleando. Me siento mal porque es una leyenda. Uno ahora puede ver que no es el mismo. Es como con Joe Louis y Sugar Ray Robinson, este tipo de boxeadores, pelearon hacia el final de sus carreras. Perdieron contra muchachos que hubieran vencido con facilidad en su mejor momento. Es triste. Y no debiera ser de esa manera. No conozco a Roy Jones a nivel personal pero se que es amado y respetado por muchos. Es hora de colgar los guantes".
Jones no escuchó y aquí está De la Hoya promoviendo una pelea que no le parece debiera llevarse a cabo. Aunque Jones fue licenciado en Nevada tras haber aprobado los requisitos medicos (al igual que Hopkins), De la Hoya no es el único que está preocupado por el.
"Mi preocupación es la misma que tienen todos por Roy", dijo Alton Merkerson, el entrenador legítimo de Jones. "Nos han escaneado el cerebro. Hicimos todo lo que se nos pidió. No tiene daños cerebrales. No ha tenido lesions importantes de los nocauts. En este momento, desde el punto de vista medico, está bien. Yo estoy con Roy, y he estado a su lado 20 años y así va a seguir".
Merkerson dijo que Jones y el conversaron sobre la posibilidad de retirarse. Dijo que apoya a Jones.
"Si, estoy preocupado, pero no va a dejar de boxear en este momento y he hablado con el", dijo Merkerson. "No le he dicho que pare, pero uno debe reconocer que todo en la vida tiene su tiempo y su edad. Si, estoy preocupado. Si estuve preocupado en el pasado y estoy preocupado ahora. Pero tras todos los estudios médicos, todo salió bien. Los studios dieron bien. Así que no me voy a seguir hacienda mala sangre porque se que va a pelear de todas maneras". Bobby Goodman, un muchacho que trabaja para Square Ring y que asistió a la pelea de 1993, dijo que siempre y cuando los boxeadores pasan sus studios médicos, hay que dejarlos pelear. "Estas son dos leyendas del boxeo que tomaron esta decisión", dijo Goodman.
Jones reconoció que hay varios que piensan que está arruinado. El cree. Hopkins es uno de ellos, motivo por el que Hopkins accedió a tomar la pelea.
Jones dijo que apreciaba que se preocuparan por él, especialmente Merkerson, que es como un segundo padre para él.
"Esto es lo que siento: en la última pelea le pregunté '¿Crees que deberíamos suspender o crees que tendríamos que llevarla a cabo?' Y dijo 'Yo creo que ahora tenemos que seguir adelanta. Aún tienes el poder". Pero en ese momento le pregunté, '¿Debiéramos suspender todo?' Y dijo, 'No'. De haberlo creído me lo hubiera dicho".
Para agregar deshonra, Jones podría no ganar dinero en la pelea. A pesar de que los campos dicen que el trato es de 50-50 -- y 60-40 para el ganador en caso de que sea un nocaut -- hagan la suma. Supuestamente el costado de Hopkins obtendría los primeros 3.5 millones tras que las expensas sean pagas. El costado de Jones obtendría los siguientes 3.5 millones con el resto siento dividido igualmente. ¿El problema? La pelea podría no llegar a generar los primeros 3.5 millones.
Schaefer dijo que comprendía la negativdad en torno a la pelea y, al igual que muchos le hubiera gustado que se de hace un par de años. Pero no fue asi y hay que ser realistas.